La reina del pop Madonna, ha sido victima de muchas criticas después de su ultima actuación el pasado 31 de Diciembre.
Las redes sociales estallaron la semana pasada cuando la estrella del pop apareció por sorpresa en el bar Stornewall Inn de Nueva York, uno de los lugares donde comenzó el apoyo por la comunidad gay.
«Estoy aquí en el lugar donde comenzó el Orgullo, el legendario Stonewall Inn, en el nacimiento de un nuevo año. Nos reunimos esta noche para celebrar los 50 años de revolución«.
Acompañada de su hijo en la guitarra, la cantante se subió al escenario para cantar ‘Like a prayer‘ y ‘Can’t Help Falling in Love‘, de Elvis Presey. «Quiero decir que nunca he actuado en un escenario tan pequeño», confesó.
A pesar de que la estrella se encontraba allí para una gran conmemoración, las criticas no tardaron en llegar, pues desde el primer momento notaron algo diferente en la cantante. Su trasero, específicamente se veía un poco más grande de lo habitual, comenzando los rumores de un posible retoque estético.
Como era de esperarse, Madonna no se quedó callada y respondió de una manera bastante contundente. En su cuenta de Instagram, publicó una fotografía en la que añadió los siguiente:
«¡Desesperadamente buscando la aprobación de nadie ………………. y con derecho a agencia libre sobre mi cuerpo como todos los demás! ¡Gracias 2019! ¡Va a ser un año increíble!»
Dejando muy en claro que, si los demás pueden hacerlo ¿Por qué ella no?
