Una popular revista estadounidense ha asegurado que la actriz Meghan Markle se ha convertido en la «burla» de varias celebridades de Hollywood, quienes ven a la duquesa como una mujer «codiciosa» que las cosas no le han salido como esperada por culpa de «su ambición». Todo esto, se produce luego del anuncio de que su próximo podcast con ‘Lemonada Media’ se retrasó hasta el próximo año.
De acuerdo a lo revelado por la revista ‘In Touch’, la duquesa de Sussex se estaría ganando una serie de burlas provenientes de Hollywood, a raíz de su presunta «codicia» por intentar trabajar en varios proyectos en vez de centrarse en solo uno.
Y es precisamente ese motivo el que ahora ha llevado a la productora ‘Lemonada Media’ a retrasar hasta el próximo año el podcast que está preparando con la actriz de ‘Suits’.
Los jefes de la compañía pusieron en pausa el proyecto ante un posible temor de que el próximo lanzamiento de su marca de estilo de vida, ‘American Riviera Orchard‘, desviara la atención de sus grabaciones de audio.
«Ella quiere todo de una vez y nuevamente le está saliendo el tiro por la culata. Se ha convertido en el centro de varias burlas internas en Hollywood y definitivamente está exagerando”, afirmaron en el citado medio.
Parece que los diversos proyectos de Meghan ahora le estarían trayendo problemas, los cuales se estarían convirtiendo en el tema de burla de varias celebridades que hacen vida en Hollywood.
«Hollywood es glamuroso y ostentoso por fuera, pero las verdaderas estrellas han trabajado duro para alcanzar estar en esa industria y tener éxito, por lo que da la impresión de que el trabajo duro no es algo que caracteriza a Meghan. Y ahora, después de todos sus fracasos, esas celebridades ¡se están riendo de ella!«, aseguraron.
El retorno de Meghan Markle a los Estados Unidos, y de la mano del príncipe Harry, vino marcado con numerosos problemas. Sin embargo, los duques de Sussex han logrado salir adelante y obtener numerosas ganancias financieras, aunque eso ha significado ganarse un aluvión completo de críticas por parte del público y demás seguidores de la realeza británica.
