La controversial actriz estadounidense Meghan Markle sigue dando mucho de que hablar en el Reino Unido, el país de su esposo, el príncipe Harry. Desde allí, las opiniones del público y medios hacia la duquesa ya no son nada alentadoras, y el odio y rechazo hacia ella se hacen cada día más evidentes, ayudados por una obsesión que provoca aún más críticas en su contra.
Los pasos de los duques de Sussex son sigilosamente vigilados desde el Reino Unido, en donde los medios del país europeo ya están más que preparados para cualquier aspecto que les llame la atención de los controversiales royals desertores.
Y ahora, medios como el ‘Mirror’ y ‘Telegraph’ han afirmado que Meghan Markle tiene una obsesión «estúpidamente grande» por llamar la atención y reflejarle al mundo que su vida cambió desde que dejó de vivir en Inglaterra.
Las recientes apariciones del príncipe Harry y Meghan, en medio del cáncer del rey Carlos III y el largo reposo de Kate Middleton tras su cirugía abdominal, han sido catalogadas como una prueba de que los duques de Sussex «siempre querrán robarse toda la atención«.
Los medios británicos no han dudado en afirmar que tanto Harry como Meghan están utilizando la reciente visita del duque al Reino Unido para «hacerse ver a si mismos como personas amables y compasivas«.
A su vez, aseguran que Meghan Markle en realidad solo utiliza los dramas de la realeza para aumentar su popularidad, ya que ella «no tiene pensado volver a pisar territorio británico».
El público británico, por su parte, tampoco tiene buenas expectativas con los deseos de Meghan. La opinión pública ha sido muy crítica con los duques, a quienes califican como unos absolutos «traidores«.
Una prueba de ello fue hace unos días, cuando los duques de Sussex se hicieron presentes en Canadá para promocionar un evento previo a los Juegos Invictus del 2025, los cuales se celebrarán en la ciudad de Vancouver y Harry es uno de los principales organizadores.
Allí, la actriz de ‘Suits’ se le vio de maravilla, sirviendo looks de invierno y usando incluso las típicas botas que tanto le gustan a la princesa de Gales. Estas acciones no han tardado de ser tildadas como una obsesión de Meghan de querer llamar la atención y de dejarse ver de lo mas feliz en medio del drama.
Pese a todo lo que se dice de ella y del príncipe Harry, Meghan Markle se mantiene en silencio ante las duras criticas y la furia que la opinión del público y medios del Reino Unido ejerce en contra de ellos.
