Aunque al príncipe Harry del Reino Unido se le había aceptado su solicitud de apelación contra el fallo de su seguridad en el país europeo, un Juez ha desestimado su argumento de acelerar el cado en los tribunales. Con esto, se le ha negado un trato especial al hijo menor del rey Carlos III.
El duque de Sussex había solicitado acelerar su apelación contra un fallo del Tribunal Superior de Londres, con la esperanza de tener audiencia a finales de julio y no hasta después de octubre. Sin embargo, un juez del Tribunal de Apelaciones le ha negado el permiso para “saltarse la cola”, borrando cualquier margen para un trato especial para el esposo de Meghan Markle.
Harry quizás pudo creer que su estatus de hijo del rey le ayudarían a acortar el tiempo para que se produjera su audiencia. Sin embargo, la justicia de su país ha desestimado su solicitud alegando que el duque no interpuso un procedimiento judicial hasta 18 meses después de que se adoptara la decisión, rechazando su derecho a la garantía automática en febrero de 2020.
La semana pasada, se aceptó su petición de apelar contra la decisión de febrero que respaldaba el derecho del Gobierno a negarle protección policial automática. Según se informa, la solicitud de acelerar el proceso estaba ligada a sus temores de que el fallo afectaría en última instancia la línea de acción de otros países con respecto a su seguridad.
Sin embargo, el Juez encargado ha afirmado que «no se sugiere con razón que el demandante tenga derecho a saltarse la cola debido a su estado«.
Con esto, el príncipe Harry deberá esperar unos meses para volver a tener un juicio contra el Gobierno del Reino Unido.
