La realeza británica ha endurecido su postura entorno a los intereses de la prensa y el público para saber sobre la salud de Kate Middleton, quien fue sometida a una cirugía abdominal la semana pasada y actualmente permanece aún hospitalizada, con algunos rumores de que estaría algo delicada a causa de un problema post operario que la tendría bajo estricta vigilancia médica.
El día de hoy se ha dado a conocer que The London Clinic, el centro de salud en donde está hospitalizada la princesa de Gales, en conjunto con una sugerencia de la corona británica, ha tomado la decisión de impedir que los reporteros acampen en las afueras de la clínica mientras dure el ingreso de la futura consorte.
Al parecer, el Palacio de Kensington se mostró preocupado por la gran cantidad de periodistas y paparazzis que han acudido al lugar para poder conseguir algunas actualizaciones sobre la salud de Kate, cuya operación abdominal fue de carácter de urgencia y algo «serio y grave» según expertos.
Los disturbios de la prensa que acampaban en el lugar también podrían haber provocado algunos problemas con los familiares de otros pacientes que hacen vida en la clínica, por lo que ahora no podrán estar alrededor del recinto, de lo contrario enfrentarán serías multas.
La realeza británica se mantiene firme en su postura de no brindar más detalles sobre el estado de salud de Kate Middleton, quien estará en convalecencia durante varios meses hasta que se recupere totalmente.
