Después de varias noticias no tan agradables, el príncipe Harry finalmente logra una victoria sobre la prensa británica, ente que ahora deberá pagarle una enorme multa al duque por haber invadido su privacidad al hackear su teléfono para obtener información personal y divulgarla a los medios, suponiendo un duro golpe al acoso que diversos paparazzis ejercen sobre grandes personalidades del Reino Unido.
Después de un largo proceso judicial, el príncipe Harry ha ganado su demanda contra el ‘Mirror Group Newspapers’ (MGN) por piratería telefónica, invasión de la privacidad y divulgación de información personal.
“Hoy es un gran día para la verdad”, se lee en la carta que ha escrito el duque de Sussex al enterarse de su victoria. Antes de ello, el Juez encargado del juicio ha emitido la siguiente sentencia sobre la demanda:
“He concedido al duque una indemnización por daños y perjuicios con respecto a cada uno de los artículos y facturas en los que se demostró la obtención ilegal de información. También he concedido una suma adicional para compensarle por la angustia que sufrió como resultado de la actividad ilegal dirigida a él y a sus allegados”, ha afirmado el Juez del Tribunal Superior de Londres.
La carta de Harry fue leída por su abogado en medio de numerosos medios que veían como el hijo del rey Carlos III lograba su importante cometido de darles una importante lección a cada uno de los entes encargados de divulgar información privada de él y otras personalidades:
“El Tribunal ha dictaminado que se llevaron a cabo actividades ilegales y criminales en los tres periódicos del Grupo Mirror (The Mirror, The Sunday Mirror y The People) de manera habitual durante más de una década. Este caso no se trata solo de piratería; se trata de una práctica sistémica de comportamiento ilegal y atroz, seguida de encubrimiento y destrucción de pruebas”, comienza leyendo su abogado.
“El Tribunal ha determinado que los directores de la junta directiva, su departamento legal, altos ejecutivos y editores como Piers Morgan, claramente conocían o estaban involucrados en estas actividades ilegales”, puntualizó David Sherborne, su defensor.
“El fallo de hoy es reivindicativo y afirmativo. Me han dicho que matar dragones te quemará, pero a la luz de la victoria de hoy y de la importancia de hacer lo necesario para una prensa libre y honesta, es un precio que vale la pena pagar. La misión continúa.”
El príncipe Harry recibirá más de 163 mil euros por esta victoria, lo que supone una importante suma que reinvindica su posición firme de lucha contra los medios británicos que han asediado su privacidad por completo.