La duquesa de York, Sarah Ferguson, ha salido victoriosa al enfrentar un gran problema de salud que pudo ser detectado a tiempo, haciendo que la vida de una de las personas más cercanas a la familia real británica no corriera peligro, y fue gracias a su valentía y al apoyo de sus dos hijas, la princesa Beatriz y la princesa Eugenie, quienes la ayudaron y acompañaron durante este proceso.
En uno de sus normales chequeos médicos la duquesa de York se le diagnosticó una enfermedad y tuvo que someterse a una mastectomía, y actualmente se encuentra recuperándose en Royal Lodge, donde vive con su exesposo, el príncipe Andrew, contando con el apoyo total de toda su familia.
Recientemente, Sarah Ferguson se expresó mediante su nuevo pódcast Tea Talks with the Duchess and Sarah, donde dijo que este había sido uno de los momentos de su vida más difíciles, en el cual sus hijas las Princesas Beatriz y Eugenie estuvieron involucradas, «creo que fue muy aterrador para ellas saber por la situación por la que yo estaba pasando, y que decisiones iba a tomar para lidiar con todo esto«, dijo la duquesa.
«Un simple gracias no es suficiente para todo el cuerpo médico profesional que me atendió y estuvieron atentos a todos los chequeos«, expreso Sarah. La duquesa también hizo énfasis en todo el trabajo que realizaban sus hijas para apoyarla, aun así estuvieran aterrorizadas por lo que su madre estaba pasando. Así mismo, Fergie se pronunció por redes sociales compartiendo mensajes e historias para todos sus seguidores, que no dejaban de hacerle saber su preocupación y su deseo de pronta recuperación.
