El príncipe William y Kate Middleton como parte de miembros de la realeza le exigen a sus trabajadores ciertas reglas denominadas extrañas y que de cualquier manera deben cumplir si desean trabajar con la familia real.
Los duques de Gales saben que deben tener cierto respeto en la realeza por lo que ellos y sus hijos deben ser sumisos y cuidadosos en la manera de realizar algunas acciones, aunque en ocasiones pueden ser un poco flexibles, siempre tratan de mantener la cordura.
Sin embargo, las reglas que sus trabajadores deben cumplir, se deben acatar tal y como se ordena, ya que de lo contrario podría verse afectado su contrato.

El protocolo de los deberes y no deberes de sus trabajadores es una lista larga, y fue un periodista encubierto quien descubrió algunas de esas exigencias.
El príncipe William y Kate Middleton no toleran alguna falta de respeto de sus trabajadores por lo que se les ha prohibido chismear en los rincones de la mansión, «tienen tolerancia cero al personal que hable con los medios«, agregó la fuente.
Además de esto, las personas que les ayudan deben tener buen ojo para los pequeños detalles buscando mantener el orden y la limpieza en los sitios. También deben cumplir con el mandado de los duques y es que no deben llamar a sus hijos por «niños«, se les debe llamar por sus nombres en señal de respeto, tampoco pueden ofenderlos o alzarles la voz.
En cuanto a la duquesa de Gales, Kate Middleton, se tiene prohibido hablar de la ropa que usa, como su marca o precios, difamar noticias negativas de la realeza también es regla de cumplir, de igual manera que caminar solo por los bordes de las alfombras y no por el medio.
Aunque son políticas extrañas, sus trabajadores entienden que se trata de los miembros de la familia real y cumplen lo que sus jefes solicitan.