El rey Carlos III está pretendiendo excluir a su primogénito el príncipe Harry de su testamento, siendo el único que estará descartado por el momento.
Los testamentos en la vida cotidiana ha sido tan importantes a lo largo de los años, de la misma manera que lo ha sido para realeza, inclusive siendo un tema mucho más peculiar por tratarse de reyes oficiales de diferentes estamentos, como del Reino Unido.
Los dos hijos del rey Carlos III han sido tan valiosos para él que desde siempre estuvieron relacionados como una familia cercana, a pesar del fallecimiento de la princesa Diana. Por lo que El príncipe William y el príncipe Harry serían los herederos principales del monarca, antes de que se generarán las polémicas en la familia real.
Desde el año 2020, año en que el primogénito menor del monarca decidió renunciar a sus procesos y deberes como miembro de la realeza, la Corona Británica ha estado en el ojo del huracán, y más aún cuando el duque de Gales decidió publicar su libro de memorias «Spare» donde atacó a su hermano, padre y su esposa, etiquetándoles cómo unas personas racistas.
Hecho por el que el rey está estudiando de manera minuciosa si su hijo merece o no el testamento, aunque ya según fuentes cercanas a la realeza se ha revelado que es un rotundo hecho.
Se ha indicado que el rencor que le tiene el rey a su hijo por sus declaraciones controversiales es bastante significativo, y no pretende perdonarme los actos que han perjudicado su labor, mucho menos ahora que está próximo a coronarse junto a su esposa, causándole la disminución de popularidad en la monarquía.
