Cada uno de los pasos que dan Meghan Markle y el príncipe Harry, son cuidadosamente monitoreados por la opinión pública y los medios del Reino Unido. El matrimonio, desde que abandonó sus deberes reales, ha tenido que sobrellevar duros ataques provenientes desde el famoso país europeo, justo como el más reciente y al que les ha hecho ganarse el apodo de «hipócritas».
Tras su controversial abandono del Palacio de Buckingham y sus respectivos honores como los duques de Sussex, Harry y Meghan empezaron a abrir su propio camino en cuanto a las distintas causas sociales que se manejan comúnmente en la realeza británica.
Con ello, crearon a mitad del año 2020 su Fundación Archewell, dedicada a apoyar a numerosos jóvenes en el área de la salud mental, tarea que Harry ha venido incentivando desde hace muchos años.
La cita en donde se ha realizado este primer evento, fue la ciudad de Nueva York, Estados Unidos, y fue justamente su llegada a la gran manzana, lo que ha provocado una nueva y muy dura crítica proveniente desde Gran Bretaña.
La razón de este nuevo ataque es que, además de sus compromisos sociales, los duques también se han pronunciado a favor de las acciones medioambientales que contrarresten el cambio climático en varias oportunidades. Sin embargo, asistieron al encuentro en Nueva York a bordo de un convoy de siete vehículos, pese a que era un viaje de menos de 60 metros de recorrido.
En tanto, desde el país inglés se dicta otro duro ataque en contra de las iniciativas que Meghan Markle y el príncipe Harry tienen entorno a sus acciones benéficas, las cuales han aumentado considerablemente desde que se mudaron a los Estados Unidos.

