Meghan Markle visitó Nigeria durante 3 días en compañía de su esposo, el príncipe Harry, siendo una visita que tuvo como propósito celebrar los diez años de los Juegos Invictus, fundación creada por el mismo duque de Sussex que busca apoyar a los soldados heridos en guerras. Allí Meghan lució varios atuendos que impresionaron a los fanáticos de la actriz y del exmiembro real, pues dejaba ver que su gusto por la moda continuaba siendo una de sus mejores cualidades.
La duquesa en su llegada uso un vestido de seda ajustado con espalda semiabierta que si bien le aportaba elegancia también un poco de frescura. Este, de la marca Heidi Merrick, además portó unas sandalias de Emme Parsons y un reloj y pulsera de Cartier como accesorios principales. Para un segundo evento lució mucho más elegante, con un traje de blazer y pantalón blanco de la marca Altuzarra. Lo combinó con tacones de punta fina de Manolo Blahnik y nuevamente accesorios de Cartier.
Por último, Meghan empleó un vestido a rayas negras con blanco de la marca Johanna Ortiz junto a unas sandalias bajas de Emme Parsons, y como uno de sus últimos atuendos, la esposa del príncipe Harry usó un vestido en tono beige con blanco, con escote halter de la misma marca anterior.

