El segundo y último show de Ariana Grande en el Festival Coachella, contó con un momento muy desagradable para la estrella pop. Ya que mientras cantaba en la pasarela le arrojaron un limón. Y Ariana fue rápida en mostrar su irritación y se quejo de la situación en el micrófono.
Esta situación puso a especular a muchos usuarios en twitter, y llegaron a la conclusión que el limón vino de algún miembro de los Beyhive, como es llamado el fandom de Beyoncé, quien fue la artista principal del año pasado.
El limón sería una referencia directa a su álbum Lemonade. Y el motivo aparente fue la falsa noticia de la revista Variety, quien afirmo que Ariana recibió 8 millones de dólares para cantar en Coachella, el doble de lo que habría sido pagado a Beyoncé. Ahora se sabe que ambas recibieron los 8 millones de dolares por presentarse.
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