El rey Carlos III, en un evento que tuvo recientemente cuando visitó las Islas del Canal en compañía de su esposa, la reina Camilla Parker, rompió un protocolo que para nada ha pasado desapercibido y del que hasta el día de hoy se sigue hablando, pues fue muy inusual.

Todo ocurrió cuando el monarca estaba saludando a la multitud que le esperaba a las afueras del evento y de repente una mujer identificada, como Kathleen Moriarty, estuvo hablando con el monarca hasta que de repente se vio que ella le había pedido un beso, a lo que el rey aceptó en la mejilla.

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Esto claramente fue un acto que rompió totalmente el protocolo que la misma página oficial de la Familia Real dice, pues cuando alguien se encuentra con un miembro de la realeza se debería hacer una reverencia o inclusive se le podría dar un apretón de manos, pero nada más de ahí, algo que claramente no ocurrió entre la dama y Su Majestad, lo que ha sido considerado como algo un poco ‘inapropiado’, sin embargo, parece que el rey Carlos III estaba consiente de su decisión y nada fue contra su voluntad.