Según algunas recientes revelaciones, el rey Carlos III cometió un gran error como padre que el príncipe William nunca cometería, demostrando que aunque el heredero al trono no culpa al monarca por sus decisiones, seguramente trata de hacerlo mejor en su paternidad.
Cuando sus dos hijos eran pequeños, el monarca del Reino Unido decidió ‘poner el trabajo en primer lugar‘ y, según Robert Jobson en su próximo libro ‘Catalina, la princesa de Gales‘, el heredero sintió que ‘el hecho de que su padre priorizara el trabajo tuvo un impacto perjudicial en él cuando estaba creciendo y no ayudó a su relación padre/hijo‘.
Además, la relación del príncipe William con el rey Carlos III ha mejorado a medida que construyeron un vínculo más estrecho, incluso después de la salida de su hermano menor, el príncipe Harry, de la monarquía británica para comenzar a ‘lanzar polémicas desde California’ en sus controvertidas declaraciones.

