Kate Middleton es sin duda alguna una de las figuras de la realeza más mencionadas y queridas de la monarquía británica, y ahora, después evidenciar notables mejorías en su estado de salud tras su diagnóstico de cáncer, la princesa de Gales no solo ha regresado a sus actividades reales con más confianza, sino que también lo ha hecho con un estilo como ningún otro.
Este 20 de mayo, Kate Middleton regresó a la glamourosa y elegante Royal Garden Party por primera vez en dos años, un evento que organiza la Familia Real Británica en los esplendorosos jardines del Palacio de Buckingham, y lo hizo con un sensacional vestido de color amarillo mantequilla de Emilia Wickstead, acompañada, de su apuesto esposo, el príncipe William.
La princesa completó su fascinante outfit con un sombrero floral de Philip Tracy del mismo tono y unos glamourosos tacones de aguja de Gianvito Rossi, un look que, por supuesto, no podía carecer de icónicos accesorios como sus pendientes Robinson Pelham que sus padres le regalaron el día de su boda.