El pasado 23 de enero, durante una visita a la Escuela Primaria Princes y a la Escuela Primaria Católica English Martyrs, el príncipe William bromea con los estudiantes asegurando que su hijo menor, el príncipe Louis, ‘necesita un buen desafío‘.
Esto luego de que los estudiantes presentes entregaran tres sobres al futuro monarca para que a su vez se los hiciera llegar a sus herederos, el príncipe George, la princesa Charlotte y el príncipe Louis; cada uno de estos contenía un billete de £10 y las reglas para cumplir el ‘Desafío de la sonrisa‘.
Este juego es bastante simple, pues su objetivo principal es hacer algo con el dinero que pueda sacarle una sonrisa a otra persona, pero sin darle el efectivo; un desafío bastante divertido, que ayuda significativamente a fortalecer los vínculos. Es por eso que, tras comprender la dinámica, el príncipe William se emocionó y agradeció a los presentes.
Fue entonces cuando dijo: «Esta actividad le encantará a Louis, él siempre necesita un buen desafío«, y finalizó la interacción con los alumnos diciéndoles: «Este gesto es muy amable, gracias por tomarse el tiempo de arreglar esto para nosotros. Adiós«.